Grifos para ahorrar en el consumo de agua

El agua es un bien de consumo cada vez más escaso, la falta de lluvias va a ir en aumento según las predicciones científicas como causante principal del cambio climático que venimos padeciendo. El aumento de las temperaturas acelera la evaporación de los pantanos que cada año reciben menos agua de las precipitaciones. Hasta que las políticas medioambientales no consigan revertir esta situación, somos los usuarios de a pie los que debemos actuar de inmediato reduciendo el consumo del “líquido elemento”.

Existen un buen puñado de estrategias, consejos, aparatología… que tienen como objetivo lograr un ahorro de agua importante en las funciones habituales de un hogar. En este artículo, como corresponde, se va a ofrecer información de la grifería existente en el mercado que tiene esta función, porque, tal y como están las cosas, no es suficiente con cerrar el grifo cuando te lavas los dientes o te afeitas, ni utilizar el agua de la ducha mientras se calienta llenando un cubo para fregar el suelo…

La tecnología aplicada al ahorro en el consumo del agua nos ha ofrecido productos cada vez más eficientes. Estos son algunos de los aparatos más destacados.

Los aireadores de agua También conocidos como atomizadores, no son otra cosa que pequeñas piezas que se adaptan a las diferentes salidas de agua en grifos, alcachofas de ducha o mangueras para mezclar con aire el agua, sin perder en ningún momento la sensación y, por tanto, el confort de tener el mismo caudal de agua de siempre. Esto implica una reducción notable en la cantidad de agua utilizada, sin perder la comodidad que otorga el mencionado caudal.
Las unidades de tratamiento de agua de la grifería Clever La prestigiosa marca de grifos Clever ha desarrollado su propio e innovador sistema de tratamiento de agua que permite obtener un ultrafinado al eliminar las partes metálicas. Una unidad de este aparato consigue conservar todas las propiedades sin alterar su sabor ni la
cantidad de minerales. No solo eso, sino que, además, consigue un ahorro considerable en el consumo habitual que requieren los cuartos de baño. Por último, es importante señalar la facilidad de instalación que posee.
La grifería con apertura en frío. Con estos mecanismos de apertura en frío, se permite que el agua fría fluya al abrir la maneta cuando esta ocupa su posición central. Aunque en un principio pudiera parecer algo normal, en realidad representa un gran avance comparado con los monomandos habituales, ya que estos daban salida al agua caliente cuando el mando ocupaba este lugar. Con este sistema, el agua caliente solo entrará o se activará cuando la maneta ocupe el extremo izquierdo.
Las columnas termostáticas. Para ahorrar en cada ducha en concreto, lo más aconsejable es llevar a cabo la instalación de una columna termostática. Considerada como la solución perfecta para disminuir el consumo, estos aparatos presentan, además de un considerable ahorro en el caudal, también en la energía utilizada, puesto que mantienen fija la temperatura elegida mientras dura el tiempo de la ducha, evitando un absurdo desperdicio de agua en las esperas para alcanzar la temperatura ideal cada vez que se cierra y se abre el grifo.
Instalar duchas de bajo flujo. En demasiadas ocasiones cometemos el error de abrir al máximo la ducha para sentir la presión del agua, creyendo que así la limpieza será más profunda. Esto es un error, el agua con una presión menor cayendo sobre nuestro cuerpo hace exactamente el mismo trabajo, el esfuerzo deberemos hacerlo nosotros mismos al enjabonarnos. Con una ducha de bajo flujo, el resultado es el mismo y el consumo de agua bastante menor.
Los pulsadores de doble descarga. Estos mecanismos están diseñados para ahorrar agua en las cisternas. Los sistemas de doble descarga para el inodoro consiguen hacer uso de la cantidad de agua necesaria para según cada caso. Con dos posiciones para soltar una carga mayor o menor son fáciles de instalar, pudiendo elegir entre los de 6/3 o los de 4,5/3 litros. Se colocan dos pulsadores para que el usuario pueda elegir cuando utilizar uno u otro y no desperdiciar cuando no haga falta.
El buen uso del grifo monomando. Es posible actuar sobre el tradicional grifo monomando para ahorrar el consumo de agua con la instalación de algunos elementos accesorios que se instalan con facilidad y rapidez. Por ejemplo, con el ya mencionado aireado o el sistema de apertura en frío, fáciles ambos de instalar en un grifo monomando.

Aunque, también, se puede colocar un tope intermedio de apertura, que no es otra cosa que un sistema para que al abrir el grifo salga siempre un caudal considerado medio, es decir, que sea suficiente para las acciones que se acometen diariamente, asegurando que no se abre en exceso inútilmente. Si se quiere más cantidad de agua, el usuario solo tendrá que aplicar un poco más de fuerza hacia arriba para que este se abra completamente y vuelque todo el caudal que permite el grifo.

Por último, para seguir optimizando este aparato, es posible instalar un dispositivo anti fuga. Se trata de unas electroválvulas cuyo objetivo consiste en cortar el paso del caudal líquido si se produce algún tipo de fuga, por muy pequeña que esta sea. Se trata de un sistema muy eficaz para evitar inundaciones en caso de que llegue a producirse alguna rotura, ya sea de manguitos o tuberías, pudiéndose colocar en cualquier grifo, ya sea en la cocina como en el baño o en el patio o jardín.

En definitiva, con una pequeña inversión es posible disminuir la factura mensual por consumo de agua y contribuir con el medio ambiente al tener la precaución de no ir desperdiciando este elemento fundamental para la calidad de vida que es tan preciado, útil y necesario como cada día más escaso.

Recuerda utilizar estos mecanismos para reducir este consumo y aplicar estrategias en el resto de actividades diarias, como cerrar el grifo al lavarse los dientes o afeitarse, como ya se ha mencionado, pero, también, lavar el automóvil de forma consciente para ser más eficiente, usar lavavajillas o poner lavadoras solo cuando estas estén llenas, ducharse en lugar de bañarse, reducir el tiempo en la ducha, regar a primera hora de la mañana, instalar recolectores de agua de lluvia que después se podrá utilizar para dar de beber a las plantas…